Papá y sus series: Homeland y la maternidad

Antes de empezar he de advertirlo: si no has visto la última temporada de Homeland y tienes intención de verla, no sigas leyendo, ¿vale?

En serio, voy a desvelar partes importantes de la trama. No sigas. Es por tu bien.

¿Estás seguro de que quieres seguir leyendo? Piénsalo un segundo. Es una serie de intriga, lo divertido es no saber lo que va a pasar.

Muy bien, pues tú lo has querido: al final, Brody muere. ¡Ale! ¡Ya está! ¿Estas contento?

Pero no es de eso de lo que quería hablar, sino del tratamiento que dan a la maternidad en la serie. Sobre todo en el último capítulo: The Star. 

Por si no has visto la serie pero no vas a verla y por eso has seguido leyendo a pesar de las advertencias te pongo en situación: Carrie es una agente de la CIA que está loca como una regadera pero en realidad es la más lista de toda la agencia porque, por lo que parece, ella es la única que se da cuenta de las cosas. El resto de agentes son idiotas perdidos. Pues bien, resulta que esta chica se enamora perdidamente de un ex-marine que primero parece bueno, luego parece malo, luego vuelve a parecer bueno, luego otra vez malo y así ad infinitum (es lo que tiene estirar una trama que debería haber concluido en la primera temporada ) y, claro, echan unos cuantos casquetes y en uno de estos que va y se queda embarazada.

Por otro lado el ex-marine ya tiene dos hijos con su ex-mujer: un niño y una niña adolescentes, pero para él es como si solo existiera la niña. Del hijo pasa olímpicamente. Vamos, que por no tener, el chaval no tiene apenas ni diálogos. Es más, la decisión de aceptar la gran misión de la temporada la toma por su hija a la que se arriesga a ver aun poniendo en peligro su tapadera, pero al hijo ni caso ¿"pa" qué?

Volviendo al embarazo de Carrie, como es una trama secundaria se ignora por completo hasta el capítulo final donde se lo cuenta al ex-marine (que va y luego se muere, ya ves tú) Después en un salto temporal y estando ya de 8 meses le ofrecen un ascenso y un traslado a Turquía. Debido a esto, decide que es imposible conciliar su vida laboral con la profesional y que le va a dejar la cría a su padre, es decir, al abuelo de la criatura. Chica, pues da gracias que no vives en España.

Vamos, que parece que los guionistas la embarazaron para dar un toque más dramático si cabe a la muerte del ex-marine y luego no sabían que hacer con el bebé para la 4ª temporada y como, parece ser que deshacerse de los niños (¿os acordáis de la niña pequeña de Cosas de Casa?, un día subió unas escaleras y nunca más las bajó) o menospreciarlos es tónica habitual en la TV (otro día analizaremos otras series y su trato a los más peques) pues se sacaron de la manga lo de dejarlo con el abuelo. ¿No sería interesante ver como combina Carrie su trabajo como agente de la CIA, además en un nuevo puesto, con la maternidad? A mí si que me lo parece.

Señores guionistas están ustedes dando un mensaje erróneo. Da igual si una mujer es agente secreto, bombero o dependienta del Zara. Debería poder ser madre y disfrutar de sus hijos sin tener que, por ello renunciar a su carrera, que luego los políticos se creen todo lo que sale por la tele.